Muchas veces por más que queremos establecer buenos hábitos nos vamos a la oficina y desaparece todo ese trabajo, ya que no hay tiempo, estamos corriendo, estamos esterados.

Por eso les compartimos estos consejos, para que veamos que no es imposible, solo requieren un poco de constancia:

• Haz tu despensa el fin de semana.
• El domingo adelanta haciendo platillos que puedas congelar y consumir durante la semana (arroz, frijoles, salsa de tomate casera, etc.)
• Llévate fruta, almendras, nueces para los snacks.
• Siempre ten un vaso con agua servido en tu oficina, tómalo cuando se te antoje algo.
• Llévate un licuado o un smoothie como parte básica de tu mañana. Reducirás antojos y te nutrirás. Lo puedes dejar hecho una noche antes.
• Lleva tés para sustituir por café, por lo menos sustituye uno al día.
• No acompañes el té ni el café de algo adicional (pan, galletas) disfrútalos solitos.
• No tengas comida en tu escritorio. Así te evitarás comer por ocio, aburrimiento y estrés.
• Come siempre una ensalada antes de la comida. Te ayudará a escoger bien el siguiente platillo.
• Lleva lunch de tu casa, evita restaurantes en la medida posible.

Promueve hábitos saludables en la oficina, tus compañeros sabrán que eres saludable y solo te ofrecerán ese tipo de alimentos.

“TRABAJAS MEJOR SINTIÉNDOTE BIEN”.